Bueno señores, por lo que se desprende de las investigaciones realizadas por el comité del 6 de enero, el ataque al Congreso fue premeditado, planeado, lanzado y arengado por Trompo Loco. Y el cuento del fraude electoral era parte del mismo plan. Ahora ha salido a la luz que la decisión de reclamar fraude y no admitir la derrota el día de las elecciones, fue de un borracho llamado Rudy Guilliani. Los asesores de campaña de trompo Loco dijeron al presidente que debía aceptar la derrota pero que Guilliani le metió en la cabeza al hombre que no, que él no perdió, que hubo fraude. Según los asesores, Guilliani estaba borracho como una uva fermentada.
En este, tira y jala, los que van a caer en la chirola son los chiquitos, porque Trompo Loco tiene muchas formas por las cuales salir inmune. Además, de que tal parece que el Congreso resulte de las elecciones de noviembre va estar formado por sus fieles seguidores.
¡Que el Señor nos encuentre confesados!
Por otro lado, la inflación sigue a pasos de gigante, la gasolina sigue subiendo y con ella también los precios de todos los productos. De momento para llenar el tanque del auto habrá que hacer un préstamo hipotecario, y para hacer la compra de la semana, asaltar un banco.
Entre tanto, el presidente Joe Biden sigue anunciando más embargos a Rusia, que es de donde viene el 12 por ciento del petróleo norteamericano y un porcentaje importante de cereales e insumos agrícolas. También, el hombre insiste en proveer a Europa del petróleo y el gas natural que ésta importa de Rusia. O sea, que a los americanos se los beba un pato.
Si sigue como va, es un seguro perdedor de las elecciones del 24.
Bueno, y ya dizque llegaron a un acuerdo los senadores demócratas y trompoloqueños (antes llamados republicanos), para regular las armas. ¡Otro cuento! Lo mismo que decir, atole con el dedo. Van a subir el límite de la edad para comprar armas, pero no del todo. Si la persona es menor de 21 tiene que estar autorizado por otro adulto. Van a limitar la capacidad de los peines o cartuchos de las armas de asalto. ¿So? Pero no van a prohibir las armas de asalto. ¿En qué estamos?
Eso quiere decir, que el vaya a hacer una matanza debe llevar varios cartuchos.
En realidad, es solo un drama para calmar a la gente que reclama poner control a la venta de armas para que no ocurran más masacres. Una muestra más de que no hay ningún interés en los legisladores en resolver el problema.
Saliendo del patio, este domingo son las elecciones presidenciales en Colombia. En estos comicios se decidirá si ese país suramericano seguirá en el mismo estilo de vida desde hace décadas o si tratará de encontrar un nuevo camino.
En Colombia matan con frecuencia, como si no fuera nada, a dirigentes campesinos, gremiales y de derechos humanos. El gobierno se limpia las manos y todo sigue igual. La desigualdad social es cada vez mas grande y muchas familias están huyendo del país.
Los colombianos tienen la palabra, lo sabremos este domingo.
Nos vemos en los próximos jalapos si la Virgencita lo permite.
