GRAND RAPIDS, MICHIGAN (EVH).- El fiscal del condado de Kent, Chris Becker dijo el pasado lunes 2 de mayo que espera no tardar más de un mes en tomar la decisión sobre el caso de Patrick Lyoya, el inmigrante del Congo que murió baleado por un agente policial durante una parada de tráfico.
Becker tendrá que decidir si pondrá cargos y de qué a grado al oficial Chris Schurr, quien en el forcejeo con Lyoya le disparó a este último en el suelo en la parte de atrás de la cabeza.
El hecho ocurrió el 4 de abril en la mañana en el sureste de la ciudad cuando Schurr ordenó a Lyoya detenerse debido a que los números de la placa del su auto no coincidían con los de la registración del mismo.
Lyoya salió del auto e intentó escapar y Schurr trató de detenerlo y se produjo un forcejeo entre ambos.
La comunidad afroamericana reaccionó indignada ante el caso y está reclamando que el agente sea acusado de homicidio.
Para el fiscal Chris Becker, el caso Lyoya es complicado y él necesita tener todas las evidencias que recogió la policía estatal para concluir su investigación.
“Yo no puedo decir que me voy a tomar más de un mes, pero tampoco será una semana, tengo que tener todos los detalles como lo que pasó con el Taser, con la cámara del oficial y otras informaciones”.
Explicó que no quiere actuar sin tener por seguro todas las piezas del caso para no tener que encontrar después evidencias que pueden cambiarlo todo.
El caso Lyoya alcanzó relevancia nacional por las acusaciones de racismo contra la policía que vienen haciendo defensores de los derechos civiles y dirigentes afroamericanos.
Al funeral de Lyoya en Grand Rapids, asistió el reverendo Al Sharton quien enérgicamente condenó la acción del policía y demandó que fuera llevado a la justicia.
Chris Becker ofreció las declaraciones durante buna conferencia de prensa a la que convocó el martes para informar de su decisión respecto a dos casos ocurridos en marzo en el condado.
En el primer caso, un hombre disparó fatalmente a otro que intentaba aparentemente entrar en su vivienda o robar su vehículo. Según el reporte, los disparos se produjeron cuando el intruso apuntó al propietario del vehículo con un arma proveída de laser.
En el segundo caso, dos oficiales dispararon contra un hombre que había chocado su auto contra un poste del tendido eléctrico, al confundir las explosiones del transformador con disparos contra ellos. Nadie resultó herido. Los dos oficiales estaban en la patrulla escribiendo la información del accidente mientras el conductor esperaba sentado en la acera. Sorpresivamente el transformador del poste produjo un ruido que sonó como un disparo y los agentes pensaron que el conductor le estaba disparando a ellos, por lo que respondieron disparando contra él. El hombre salió corriendo, por lo que salvó milagrosamente la vida.
El fiscal informó que en ninguno de los dos casos formularía cargos. En el primero, porque se trató de defensa propia y en el segundo porque, según él, la acción de los oficiales estaba justificada debido a que temieron por sus vidas.
